El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha incorporado hoy [martes 9] dos nuevas guaguas a las líneas que cubren los trayectos en determinadas zonas de Anaga, como Igueste de San Andrés o Taganana. Estos vehículos, que se unen a las cinco unidades presentadas hace algunos meses, disponen de los últimos avances en materia de accesibilidad y seguridad.
El alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, fue el encargado de presentar los vehículos a los vecinos de esta parte de la capital en la parada de guaguas situada en la playa de Las Teresitas. Junto al regidor municipal estuvieron presentes el cuarto teniente de alcalde y concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, y la concejala del Distrito de Anaga, Carmen Delia Alberto, así como distintos responsables de la compañía Transportes Interurbanos de Tenerife (TITSA).
Bermúdez definió a los vehículos como “guaguas modernas y sostenibles, que van a desarrollar una importante labor tanto en Igueste de San Andrés como en Taganana. Son mucho más cómodas gracias a que son plenamente accesibles y permiten, mediante una plataforma elevadora, que las personas que van en silla de ruedas puedan acceder al interior de los vehículos de manera sencilla”.
“Es una mejora –prosiguió el alcalde– que se encuentra dentro del plan de renovación de la flota que estamos acometiendo junto a TITSA en las líneas que operan en Santa Cruz y que permitirá que, entre este año y el que viene, se pongan en funcionamiento alrededor de 40 nuevas guaguas”.
El presupuesto destinado a la adquisición de estas dos unidades, en la modalidad de renting a siete años mediante concurso a Mercedes-Castrosua, asciende a 380.883 euros.
Los vehículos tienen una longitud de 10,5 metros y capacidad para 35 plazas, 31 de pie y 2 para sillas de ruedas. Además, también cuentan con una plataforma elevadora para facilitar el acceso de personas con movilidad reducida.
Equipadas con un motor Mercedes de inyección directa common rail y una caja de cambios de 6 velocidades ZF Ecolife, con sistema Topodin, que establece la marcha más idónea en función de la orografía del terreno. Esta combinación hace que disminuya notablemente el consumo de combustible y el nivel de ruido, cumpliendo con la última normativa Euro 6 de baja contaminación.
La carrocería tiene un sistema de descenso y posterior elevación para facilitar la entrada a personas con movilidad reducida y, en el interior, pulsadores con la palabra stop inscrita en Braille o avisadores ópticos para personas con visión reducida. También incorporan otras mejoras, como puertos USB para la recarga de dispositivos móviles o pantallas informativas con tecnología TFT.
Estas dos nuevas unidades están equipadas con cinco cámaras de videovigilancia en su interior con el fin de garantizar tanto la seguridad de los pasajeros como la de los trabajadores.