El consejero insular de Cooperación Municipal y Vivienda del Cabildo de Tenerife, Zebenzuí Chinea, ha anunciado hoy la firma del contrato de adjudicación de la redacción del proyecto y dirección de obras de la denominada ‘Renovación de redes de alcantarillado de Santa Cruz de Tenerife-Valleseco’.
Chinea ha asegurado que “una vez contemos con el proyecto, se licitarán las obras que, con un presupuesto inicial de 2,8 millones de euros, serán financiada a partes iguales por la institución insular y el consistorio capitalino, en base al Plan de Cooperación Municipal 2018-2021, y tendrán un plazo de ejecución de 20 meses”.
Expone que el propio Consejo Insular de Aguas, dependiente del área de Desarrollo Sostenible y Lucha contra el Cambio Climático, que dirige Javier Rodríguez Medina, “alerta de la existencia de varios puntos de peligro hidráulico que corren las viviendas de la zona superior del núcleo al recibir el agua de escorrentía que transporta todo aquello que encuentra a su paso desde la parte alta de ladera, por la elevada pendiente de la misma y pese la existencia de un muro de protección para retener estos acarreos.
También ha explicado que “la red de pluviales existente consta de rejillas e imbornales ubicados en los puntos de cruce de las calles con los dos barranquillos, que se conectan. Esto, unido al elevado nivel de agua que se acumula en momentos de intensa lluvia por la poca capacidad de recogida, provoca que las tapas de las alcantarillas salten, provocando un peligro que se acrecienta y que, a su vez, provoca importantes humedades en las viviendas. De ahí, la importancia de modificar las conexiones de los imbornales existentes para acoplarlos a la red de aguas pluviales”.
Del mismo modo, Chinea reconoce que “el estado de las infraestructuras actuales es muy deficitario, por lo que se trata de un problema, que genera inseguridad en los vecinos y vecinas y que merecía una solución, por lo que había que sacar adelante esta actuación ya que, debido a la gran pendiente de la ladera, se pone en peligro la estabilidad de viviendas de la zona alta del núcleo”.
El consejero ha destacado también que, debido al mal estado de las fachadas de las viviendas, se deberá contemplar trabajos de impermeabilización y remate de fachadas. Asimismo, se contemplará en el proyecto la reposición de barandillas y bolardos; a la vez que “habrá que tener en cuenta a la hora de ejecutar las obras, cuando tengan lugar, que afecten lo menos posible a la población. De igual modo, tendremos comunicación directa con la población a la que explicaremos detalladamente en qué consistirá la actuación cuando se acerque el momento”.
Saneamiento y abastecimiento
El consejero ha añadido, asimismo, que la obra incluirá, además, la renovación de la red de saneamiento, ya que la actual está en “muy mal estado; por lo que se extremarán las precauciones para evitar roturas o vertidos de aguas residuales”. Del mismo modo que “se instalará un colector y se ejecutarán pozos de resalto para reducir la velocidad de circulación del agua en la tubería dado que la pendiente es del 50%, a la vez que se instalará un aliviadero para evitar la sobrecarga del colector”.
La actuación también incluye la renovación de la red de abastecimiento, “que está formada casi en su totalidad por tuberías de acero galvanizado en muy mal estado de conservación, con gran parte de las arquetas y válvulas de corte de las acometidas inservibles”.