La Red Mundial de Reservas de la Biosfera Insulares y Costeras (RMRBIC) se crea en el año 2009, con el apoyo de la UNESCO, para impulsar el desarrollo sostenible de forma específica en islas y zonas costeras y promover estrategias de adaptación y mitigación frente al cambio climático.
Las islas y zonas costeras, aunque representan una gran diversidad de contextos, tienen una serie de características compartidas y afrontan retos comunes. Son enclaves muy sensibles debido a su alto nivel de biodiversidad y a la gran cantidad endemismos y de ecosistemas frágiles y raros que albergan. Son regiones especialmente vulnerables a los procesos de cambio global como el cambio climático, y a su vez tienen un gran potencial en el estudio de estos cambios y en la aplicación y ensayo de políticas de desarrollo sostenible.
En este contexto, el trabajo en red es una gran oportunidad para que la cooperación y la transferencia de conocimiento permitan el enriquecimiento común de todas las reservas de biosfera insulares y costeras que se integran en esta red.
La red RMRBIC cuenta con numerosas Reservas de la Biosfera distribuidas por los cinco continentes, entre ellas las reservas de Canarias: El Hierro, Fuerteventura, Gran Canaria, La Gomera, Lanzarote, La Palma y Macizo de Anaga.
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